lunes, 21 de marzo de 2011

Ruleta del presente.

Otra vez mirando al horizonte con las pupilas perdidas en el rojo amanecer.
Mirada perdida y mente vacía, en realidad sin pensar.
Tan solo está.
Allí no existe el tiempo, no hay reloj que se mida a sí mismo, allí no existe religión que valga.
No existe motivo, no existe sentimiento que describa.
Allí no es día ni noche pues las estrellas aun bañan el cielo y el sol se ve apenas presente.
Otra vez, en un alma vacía donde no hay nada.
Nada existe nada más que el presente.